Escrito por Cesar Hilares Madera.
Las barreras o cortinas de humo son soluciones de fuego activo que evitan el movimiento del humo y el calor de una zona de humo a otra mediante la canalización o empujando el humo hacia los puntos de extracción de humo empleados en un edificio. Estas son barreras fabricadas para proporcionar separación de zonas en edificios arquitectónicos complejos, por lo que operan para detener la propagación del fuego dentro de una estructura.
El humo tiende a moverse hacia arriba cuando hace calor y se extiende a lo largo de las zonas creando caos. Las cortinas de humo son barreras colocadas como parte de los sistemas de gestión de humo en un edificio para canalizar el movimiento del humo en un edificio hacia los puntos de extracción. Éstas cortinas crean un bloque para el movimiento del humo en las capas superiores de una zona a otra, lo que obliga al humo a moverse hacia las direcciones de los sistemas de ventilación de humo ubicados en el edificio.
Las barreras o cortinas de humo forman un elemento crítico de los sistemas de ventilación de extracción de humo y calor. Tales sistemas crean una capa libre de humo sobre el piso al eliminar el humo y el calor y mejorar las condiciones para un escape seguro. Esto permite la evacuación segura de personas de los edificios, al tiempo que reduce el daño por incendio al evitar la acumulación de humo, lo que permite combatir incendios, reduce las temperaturas y finalmente retrasa la propagación del fuego.
Las cortinas de humo permanecen invisiblemente retraídas hasta que se activan mediante una alarma, una señal del detector o un interruptor manual. Una vez activados, descienden de forma segura a su posición operativa. Utilizadas en lugar de muros tradicionales sin carga, puertas de humo y pantallas de humo, las cortinas de humo ofrecen una mayor flexibilidad para diseñadores y arquitectos. Debido a su aparente invisibilidad, permiten que las áreas abiertas sean de mayor tamaño en comparación con el uso de otros equipos de seguridad contra incendios y humo.
Podemos encontrar dos tipos de cortina de humo; fija y móvil.
¿De qué están hechas las cortinas de humo?
Tradicionalmente, las telas protectoras contra incendios son telas de vidrio y fibra de vidrio. Esto significa que su tela base es esencialmente filamentos de fibra de vidrio, que no se descomponen, encogen, estiran, desvanecen con el tiempo y lo más importante, no se queman. Estas fibras finas también se pueden enrollar juntas como un hilo y luego tejerse en diferentes patrones para proporcionar una variedad de fortalezas y flexibilidad. Esto los hace perfectos para ocultar fácilmente las cortinas de humo.
Un paño básico de fibra de vidrio puede soportar temperaturas de hasta 600° C. Sin embargo, estos tejidos también se pueden tejer con un hilo de metal para agregar más resistencia, durabilidad y aumentar la resistencia a la temperatura a 1000 ° C.
Aplicaciones de cortinas contra incendios y humo
Las cortinas de humo son más livianas que los productos de seguridad contra incendios más tradicionales y ofrecen una mayor libertad de diseño y apertura. En consecuencia, se han utilizado barreras de cortina de humo en todo tipo de edificios y en una variedad de aplicaciones. En esta gama de aplicaciones se incluyen las siguientes:
● Atrio, vestíbulos y recepciones
● Aberturas en muros
● Salida y separación del corredor
● Protección de límites
● Compartimentación
● escaleras y escaleras mecánicas
● Ascensores y ascensores Lobbies
● Medios de escape protegidos
